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Desde el principio tenía muy claro como quería que fuera la portada de la primera parte de El viaje de Tori, por ello y para no comprometer el mismo, decidí contratar los servicios de un diseñador freelance, Alonso Fernández.
Para mí, lo mas importante, era que se viera Puerto Rosa, el principal escenario de la novela, así que lo primero que hice fue pasar un boceto al artista con la colocación que quería de los personajes, título y demás elementos.
Preparaos para reíros un rato. este era el boceto inicial:
Precioso, ¿verdad? Pues a partir de ahí Alonso pudo trabajar en la composición y me propuso centrarlo todo en la portada, en lugar de relegar al pueblo a la contraportada. Totalmente de acuerdo, puesto que si Puerto Rosa iba a ser un personaje más, debería ser importante, debería estar en la portada.
Me hizo, además, diseños iniciales de los personajes, aunque no hiciera falta porque en la portada iban a estar de espaldas:
Después de estos diseños previos ya empezamos a trabajar con un boceto de la portada, primero a lápiz y papel:
Y eso era justo lo que quería, tras unos pequeños ajustes; como invertir en modo espejo el diseño, principalmente para que los personajes parezcan que están mirando hacia dentro del libro, en lugar de hacia fuera, ya podía pasar al primer entintado (digital) de la portada y posterior color básico y después luces y sombras.
¡Voilá! ¡La portada está completa! Al menos el dibujo, después nos tocó pelearnos con tipografías, colores y sombras para que quedara la portada con el título definitivo.
Para finalizar con la portada completa de El viaje de Tori: Agon.